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    A extrañas tierras voy a marchar 
    (Adiós, Adiós)

    Letra: Jorge Polar ( publicado en 1886)

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    A extrañas tierras voy a marchar, 
    pronto, muy pronto me alejaré, 
    dejo mi tierra, dejo mi hogar, 
    quién sabe cuándo tornar podré.

    Marcho al ocaso cual peregrino 
    lleno de inmensa melancolía árido,
    incierto será el camino, 
    llora tu pena ¡pobre alma mía!

    Lejos del sitio donde nací 
    mi voz doliente ¿quién oirá? 
    en esas tierras lejos de aquí 
    quién al poeta, quién ¡ay querrá!

    La madre mía llora afligida
    cuántos me quieren ¡de pena están!
    siempre es muy triste la despedida 
    porque dan pena los que se van.

    ¡Ay! Madre mía, madre adorada 
    voy a dejarte, que ingrato soy, 
    madre, de todos, la más amada 
    cómo te dejo, cómo me voy!

    Madre del alma no llores tanto
    que me desgarras el corazón! 
    cálmate madre, ¡cesa tu llanto, 
    adiós! Ay dame tu bendición!

    La virgen pura de mis amores,
    triste, muy triste, se quedará 
    como en otoño las mustias flores, 
    pálida, pálida la pobre está.

    Amada mía ¡ay tú también! 
    tú también lloras, triste de mí! 
    oh! Alma de mi alma, mi único bien 
    podré yo acaso vivir sin ti?

    Tú, de mi sueño, realidad bella,
     tú, de mi vida, pura alegría, 
    tú, de mi cielo, la única estrella,
     tú que eres alma del alma mía.

    Cuando ya lejos, lejos esté, 
    piensa, amor mío, piensa algo en mí 
    mucho en ti siempre yo pensaré, 
    cuando me encuentre lejos de ti!

    El tiempo vuela, llegó el momento 
    por el que parto rogando a Dios, 
    que se desgarra mi pecho siento, 
    prenda querida, adiós, adiós...

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    A extrañas tierras

    Versión del Dúo Velarde Medina (Sello Victor, 1913)

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    A extrañas tierras voy a marchar, 
    pronto, muy pronto me alejaré, 
    dejo mi tierra, dejo mi hogar, 
    quién sabe cuándo tornar podré.

    Marcho al ocaso cual peregrino 
    lleno de inmensa melancolía árido,
    incierto será el camino, 
    llora tu pena ¡pobre alma mía!

    La madre mía llora afligida
    cuántos me quieren ¡de pena están!
    siempre es muy triste la despedida 
    porque dan pena los que se van.

    ¡Ay! Madre mía, madre adorada 
    voy a dejarte, que ingrato soy, 
    madre, de todas, la más amada 
    cómo te dejo, cómo me voy!

    Madre del alma no llores tanto
    que me desgarras el corazón! 
    cálmate madre, ¡cesa tu llanto, 
    adiós! Ay dame tu bendición!

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